Como caerle bien a un gato y hacer que te ame para que seas feliz por siempre.
Los gatos no son como los perros: son altaneros, hermosos y orgullosos, y por ello es difícil caerles bien a pesar de que sean nuestros animales favoritos.
Caerle mal a un felino es algo que estresa mucho a los amantes de los gatos. Es por eso que consultamos la Gran Biblioteca del Internet de los Animalitosbebé para saber qué nos dicen los Sabios de la Supercarretera de la Información al respecto.
La primera regla básica es ¡actuar como si los odiaras!
Aunque no lo creas, los gatos aman acercarse a la gente que no quiere gatos cerca. No sabemos porqué, pero eso hacen.
No mires a un gato directo a los ojos: evita el contacto visual con él (o ella) y espera a que se te acerque solo.
Ten paciencia: No te apresures a apretarlo, mejor deja que se frote contra ti para establecer contacto físico en la forma de un suave masaje detrás de las orejas o sus mejillas de gatitobebé.
Sé silencioso: si llevas perro o traes niños, será difícil que un gato quiera estar contigo (a menos que sea súper sociable y lindo).
Hazte su aliado: Deja caer tus manos si estás sentado en una silla o de plano, siéntate en el piso. Así el gato verá que estás a su nivel y que no tiene que saltar a tu regazo para hacerse notar.
Aplica la técnica “Miguel Ángel”: Así como algunas de las pinturas del genio renacentista, debes colgar tu mano con el dedo índice medio extendido hacia la nariz del gato para que este te huela y se acostumbre a tu olor. Esta técnica es de las mejores para hacer que un felino se adapte a tu presencia.
Si de plano nada de esto funciona, toma un láser o un juguetito de esos que parecen caña de pescar y juega con él a ver que hace.
Al final, los gatos son dueños del cariño que dan, así que si un gato se niega a hacerte caso, tal vez nunca lo mereciste.
No obligues a un gato a quererte ni veas su desdén como un reto o una invitación a insistir, mejor acepta que simplemente no le caes bien y ya.
Conquístalo por el estómago
El gato es un animal muy inteligente, pero para ganarse su confianza de la manera más rápida posible lo mejor que se puede hacer es darle comida húmeda para gatos (latas). A este peludo le encantan las latas, mucho más que el pienso seco, así que puedes dárselas de tanto en cuando para que vea que tú le das algo con lo que disfrutar.
Así, te verá como aquella persona que le da algo rico, y probablemente te acabará siguiendo para que le des alguna lata más.
Dedícale tiempo
Dedica todo el tiempo que puedas a estar con él. Invítale a jugar con una cuerda, peluche, o con cualquier otro juguete. Las sesiones de juego deben de durar unos 5-10 minutos, y con ellas conseguirás establecer un vínculo afectivo con el peludo, ya que verá que contigo se lo puede pasar estupendamente bien, lo que hará que te coja cariño.
Además, tienes que darle cariño, pero sin agobiarlo. Si ves que gruñe, muestra los dientes, se le eriza el pelo y/o mueve las orejas hacia atrás, déjalo tranquilo.
Permite que sea un gato
Los gatos se suben a los muebles, a las camas, a las sillas, … en definitiva, por todo. Es su forma natural de ser. Cuando convivimos con uno, si queremos que realmente sea feliz tenemos que dejarle que se comporte como lo que es: un felino. Por lo tanto, además de proporcionarle uno o varios rascadores por los que pueda trepar, es conveniente que le dejes subirse allá donde quiera (a no ser que sea peligroso, claro está).
Con estos consejos, ya verás como pronto conseguirás ganarte su confianza.
Invítale a jugar
Una simple cuerda bastará para llamar la atención del gato. Muévela primero a un ritmo más o menos rápido para que fije su mirada en ella, y cuando se acerque, empieza a jugar con él. Ve alternando los movimientos rápidos con los lentos, deja la cuerda unos segundos en el suelo y en cuanto menos se lo espere, vuelve a cogerla.
Si no tienes cuerdas, puedes jugar con el gato con una pelota de juguete o de papel de aluminio (tiene que ser como mínimo del tamaño de una pelota de golf).
Ofrécele golosinas para gatos
Si quieres conquistar a tu gato… hazlo a través de la comida. Aparte de asegurarte de que tiene agua y comida a libre disposición, es muy recomendable que le ofrezcas golosinas y/o comida húmeda para gatos (latas) de tanto en cuando. En cuanto menos te lo esperes seguro que lo tendrás comiendo de la palma de tu mano, literalmente 😉 . Cuando eso ocurra, podrás empezar a acariciarle, ya que para entonces te habrás ganado su confianza.
No hagas movimientos bruscos ni ruidos
El sentido del oído del gato está mucho más desarrollado que el nuestro, hasta el punto de que puede escuchar el sonido de un ratón a 7 metros de distancia. Si quieres ser el mejor amigo de tu gato, es muy importante que tengas esto siempre presente, y no poner la música a todo volumen ni hacer ruido. Además, es conveniente evitar hacer movimientos bruscos pues podrían asustarle.
El gato puede ser el mejor amigo del ser humano, pero sólo si éste le dedica el tiempo que merece para entenderle y cuidarle.